La subasta de hidrógeno emerge como una herramienta clave para incentivar la producción y reducir la brecha económica entre el coste de producción. Es necesaria para afrontar la disposición actual de los consumidores a pagar en un mercado donde el hidrógeno no renovable sigue siendo más económico.

La subasta del Banco Europeo de Hidrógeno representa un paso significativo hacia la consecución de los objetivos de descarbonización hacia fuentes de energía más sostenibles en Europa. Al proporcionar incentivos financieros y establecer un marco regulatorio claro, esta iniciativa contribuirá de manera sustancial al florecimiento del mercado de hidrógeno renovable en Europa. Así, se consolida el compromiso de la Unión Europea con la acción climática y la innovación tecnológica.

Detalles de la subasta de hidrógeno

Los licitadores tienen hasta el 8 de febrero de 2024 para presentar sus solicitudes a través del portal de licitaciones y financiación de la Unión Europea. Las ofertas deben basarse en una propuesta de prima de precio por kilogramo de hidrógeno renovable producido, con un límite máximo establecido en 4,5 euros/kg. Las ofertas que cumplan con los requisitos de calificación y se ajusten a este límite serán clasificadas del precio más bajo al más alto. Se les apoyará en ese orden hasta agotar el presupuesto de la subasta.

Beneficios para los proyectos seleccionados

Los proyectos seleccionados no solo recibirán la subvención concedida. También, tendrán la oportunidad de obtener ingresos adicionales provenientes de las ventas de hidrógeno en el mercado. Este respaldo financiero se extenderá por un máximo de 10 años. Una vez que los proyectos hayan formalizado sus acuerdos de subvención, deberán iniciar la producción de hidrógeno verde en un plazo de cinco años.

Garantizando la igualdad

Para evitar la fragmentación en las etapas iniciales del mercado europeo del hidrógeno, se establece la prohibición de acumulación con otros tipos de ayuda de los Estados miembro participantes. Esto busca garantizar la igualdad de condiciones para todos los proyectos, independientemente de su ubicación geográfica, y reducir los costos administrativos asociados con los planes nacionales de apoyo al hidrógeno.

Mecanismo de Subasta de hidrógeno como servicio

Los Estados miembro podrán financiar proyectos que hayan participado en la subasta pero no hayan sido seleccionados para recibir apoyo del Fondo de Innovación. Esto se logrará mediante el mecanismo de «subastas como servicio» del Banco de Hidrógeno. Esto permite a los Estados miembros otorgar financiamiento nacional a proyectos adicionales en su territorio sin la necesidad de realizar una subasta de hidrógeno separada.

Consideraciones regulatorias

Es esencial destacar que cualquier ayuda ofrecida por los Estados miembro a través de este servicio se considerará ayuda estatal. En consecuencia, deberán notificar su apoyo a la Comisión. Así, se beneficián de un proceso de aprobación simplificado. Esto está en línea con las directrices sobre ayudas estatales para el clima, la protección del medio ambiente y la energía a nivel de la Unión Europea.

Los pasos de la subasta de hidrógeno en Europa

Las subastas de energía son un mecanismo utilizado para la asignación de contratos de suministro de energía a largo plazo. Estas subastas se llevan a cabo para fomentar la competencia y promover la generación de energía renovable. Es una herramienta fiable para garantizar un suministro estable de electricidad.

Los pasos generales que suelen seguirse en una subasta de energía son:

Convocatoria de la subasta: El organismo regulador, generalmente un ente gubernamental o una agencia de energía, emite una convocatoria pública para la subasta. Esta convocatoria establece las condiciones y los requisitos para participar en la subasta, así como los volúmenes de energía requeridos y los plazos.

Registro de participantes: Los interesados en participar en la subasta deben registrarse y cumplir con los requisitos establecidos, que pueden incluir aspectos técnicos, financieros y legales. Esto asegura que los participantes sean capaces de cumplir con los compromisos de suministro en caso de resultar ganadores.

Presentación de ofertas: Los participantes presentan sus ofertas en la subasta. Estas ofertas incluyen detalles como la cantidad de energía a suministrar, el precio ofertado y otros términos y condiciones. Es importante mencionar que las subastas pueden tener diferentes modalidades, como subastas de precios descendentes (donde los participantes compiten ofreciendo los precios más bajos) o subastas de precios ascendentes (donde los participantes compiten ofreciendo los precios más altos).

Evaluación de ofertas: Una vez cerrado el período de presentación de ofertas, se procede a evaluarlas. Esto puede implicar la verificación de la capacidad técnica y financiera de los participantes, así como el cumplimiento de los requisitos establecidos en la convocatoria. También se evalúan otros aspectos, como la contribución de las ofertas a la diversificación del suministro energético y la promoción de fuentes renovables.

Adjudicación de contratos: Con base en la evaluación de las ofertas, se adjudican los contratos de suministro a los participantes que hayan presentado las mejores ofertas. Los contratos pueden tener una duración establecida, generalmente a largo plazo, para asegurar la estabilidad y la planificación en el suministro de energía.

Ejecución de los contratos: Una vez adjudicados los contratos, los ganadores deben cumplir con los términos y condiciones establecidos. Esto implica desarrollar y operar las instalaciones de generación necesarias para suministrar la energía comprometida. Los participantes también deben cumplir con los estándares de calidad, seguridad y sostenibilidad establecidos por las regulaciones vigentes.

Seguimiento de la subasta: Las autoridades regulatorias supervisan el cumplimiento de los contratos y pueden imponer sanciones en caso de incumplimiento. Además, se realizan controles y auditorías periódicas para garantizar la transparencia y la integridad del proceso de subasta.

La primera subasta de hidrógeno en Europa

La Comisión Europea ha desvelado las especificaciones fundamentales que regirán la primera subasta de hidrógeno renovable en la Unión Europea. Este evento marca un hito significativo en la búsqueda de soluciones energéticas más limpias y sostenibles.

La primera subasta piloto de hidrógeno renovable estaba planificada para el 23 de noviembre. La primera subasta oficial será en el primer trimestre de 2024. En apoyo a estos ambiciosos empeños, la Unión Europea ha destinado aproximadamente 800 millones de euros para la implementación de proyectos de hidrógeno renovable en los 27 estados miembros.

Dentro de este proceso, los desarrolladores de proyectos deberán presentar sus propuestas y establecer un precio para la producción de hidrógeno. Aquellos que ofrezcan los precios más competitivos recibirán un incentivo en forma de una prima fija. Esta se extenderá a lo largo de un período de 10 años. Estará indexada a la cantidad de hidrógeno producido a partir de fuentes de energía renovable.

El precio máximo de la subasta de hidrógeno

La Unión Europea tiene previsto imponer un precio máximo de 4,5 euros por kilogramo de hidrógeno para ciertos beneficiarios, siempre y cuando los fondos destinados no se hayan agotado previamente. Conviene resaltar que este valor representa un incremento del 50% en comparación con la oferta estadounidense.

No obstante, es imperativo tener presente que, a diferencia de Estados Unidos, en la Unión Europea, el logro de esta cifra no está garantizado. Los aspirantes deberán competir arduamente para alcanzar este umbral de precio. El factor tiempo desempeña un papel de relevancia en esta competición, dado que los proyectos seleccionados deberán estar plenamente operativos en un período máximo de cinco años. Además, deberán contar con la validación de la Unión Europea en cuanto a su producción de hidrógeno a partir de fuentes de energía renovable.

Garantias financieras

Adicionalmente, se impondrá el requisito de presentar garantías financieras como salvaguarda para asegurar la exitosa finalización de los proyectos. La finalidad es prevenir cualquier forma de especulación en el proceso de la subasta de hidrógeno.

Este emocionante progreso representa el primer paso hacia la creación del Banco Europeo del Hidrógeno. Esta es una de las iniciativas más preeminentes en el marco del programa «Fit for 55» de la Unión Europea. Tiene como objetivo primordial catalizar la transición hacia una economía más respetuosa con el medio ambiente y sostenible.

Esta medida se suma a la que tiene previsto movilizar en el marco de los proyectos de hidrógeno renovable que se están poniendo en marcha en la UE, incluido el corredor de hidrógeno del mediterraneo. Este proyecto trata de bombear el combustible desde la península ibérica hacia el norte de Alemania. Su puesta en marcha se desea en el año 2030, pero aun está sometida a desafios técnicos y políticos.

Habrá más subastas de hidrógeno

La iniciativa comunitaria nace como respuesta a los subsidios multimillonarios que han anunciado otras potencias como Estados Unidos y China para sus propias industrias verdes. Unas ayudas que, por su intensidad y por discriminatorias, podrían distorsionar la competencia en el mercado, relegando a los fabricantes europeos en la carrera por liderar la producción y el transporte de hidrogeno verde.

La Comisión Europea afirma en la propuesta que a esta subasta piloto podrían seguirle otras, no solo vinculadas a la tecnología del hidrógeno. La Comisión considera extender el nuevo mecanismo competitivo de subastas para aumentar la fabricación de componentes para la energía eólica, solar, baterías y electrolizadores.

primera subasta de hidrógeno en la UE